Uso del intérprete de órdenes y consulta de registros
Hay distintos métodos para obtener un intérprete de órdenes mientras
realiza una instalación. En la mayoría de los sistemas, y en el caso
de que no esté instalando utilizando una consola serie, el método
más sencillo es cambiar a la segunda consola virtual
pulsando Alt izquierdo F2
Esto es, la tecla Alt a la izquierda de la barra
espaciadora, y al mismo tiempo la tecla de función
F2.
(en un teclado Mac, Opción
F2). Utilice
Alt izquierdo F1
para volver al instalador.
Si no puede cambiar entre consolas puede utilizar la opción en el menú
principal denominada Ejecutar un intérprete de
órdenes (o «shell», N. del t.). Para volver al instalador sólo
tiene que escribir exit para cerrar el intérprete.
En este punto de la instalación ha arrancado desde un disco que utiliza la
memoria RAM, y, consecuentemente, sólo dispone de un número limitado de
utilidades Unix. Puede ver los programas disponibles con la orden ls
/bin /sbin /usr/bin /usr/sbin y también si
escribe help.
El intérprete es un clon del intérprete de órdenes Bourne llamado
ash que tiene algunas características que le pueden ser
útiles como una función para completar órdenes y un histórico.
Puede utilizar el editor de textos nano para editar
y ver ficheros. Encontrará los registros del sistema de instalación
en el directorio /var/log.
Aunque puede hacer básicamente todo lo que podría hacer en un intérprete de
órdenes que le permiten hacer los programas disponibles, la opción para
utilizar el intérprete de órdenes se proporciona sólo para los casos en los que
algo no funcione correctamente o tenga que depurar algún problema.
Las cosas que haga manualmente en el intérprete de órdenes pueden interferir
con el proceso de instalaciones y dar lugar a errores o a una instalación
incompleta. En particular, siempre debe utilizar el instalador y no el
intérprete para activar la partición de intercambio.